¿Qué pasa si ponemos a conversar a nuestro productor y al mejor guionista de Argentina en la Tienda Orsai, y los rodeamos de público en vivo tomando cerveza? Esta es la primera entrega de este experimento.
¿Qué pasa si ponemos a conversar a nuestro productor y al mejor guionista de Argentina en la Tienda Orsai, y los rodeamos de público en vivo tomando cerveza? Esta es la primera entrega de este experimento.
Como si los libros, las revistas y todas las chucherías que se venden en la Tienda Orsai no fueran suficientes, la comunidad tuvo un motivo más para acercarse a nuestra casa de Serrano 1141. Gabo Grosvald, nuestro productor, convocó al multifacético Pedro Saborido —jefe de guión de «El rayo de Arquímedes»— para charlar y tomar cerveza a la vista del público. Los asistentes no solo formaron parte del episodio y participaron de la charla, que se grabó en vivo, sino que también disfrutaron de una cerveza Bieckert, que auspició este episodio.
Este capítulo —que es el primero de una serie de episodios que grabaremos en vivo y con público en la Tienda Orsai —, tuvo a Pedro como el primer protagonista de este experimento.
Gabo y Pedro tomaron al stand up como ejemplo y divagaron sobre las dificultades que conlleva hacer humor en un escenario, donde artista y espectadores convergen en una relación que muchas veces puede ser un éxito, pero muchas otras —muchísimas otras— un fracaso estrepitoso.
Con la participación de los oyentes que asistieron a la grabación del episodio, tiraron tips para crear climas, forzar aplausos, hacer reír a los dudosos y conquistar audiencias complicadas a base de oficio.
Mencionaron algunos factores poco considerados a la hora de producir un espectáculo de humor, como la cercanía con el público, la distribución de la sala, las luces y hasta la altura del techo del teatro. Todo el entorno puede conspirar a favor o en contra del standupero, amén de su rutina de chistes.
Grosvald lleva muchísimos años de trayectoria en la producción de espectáculos culturales, y Saborido es un reconocidísimo escritor, guionista, director de radio, teatro, cine y televisión, por lo que sus «trucos» para triunfar ante una atmósfera adversa fueron bien atendidos por la gente.
Un rato después, posiblemente ya entonados, la dupla se dio cuenta de que estaba contando demasiado y que alguien del público les podría robar las ideas. Así que se dedicaron a escuchar los testimonios del público, recordar anécdotas personales y ventilar los secretos de otros humoristas consagrados.
