Es imposible hablar de otro tema: Gabo Grosvald se juntó con Fiorella Bottaioli y Sebastián Arzeno para que cuenten cómo les cambió la vida ser protagonistas de «La uruguaya», a días del estreno en cines.
Es imposible hablar de otro tema: Gabo Grosvald se juntó con Fiorella Bottaioli y Sebastián Arzeno para que cuenten cómo les cambió la vida ser protagonistas de «La uruguaya», a días del estreno en cines.
El jueves 17 de agosto se estrena en muchísimos cines de Argentina la primera película de Orsai. «La uruguaya», dirigida por Ana García Blaya y protagonizada por Fiorella Bottaioli y Sebastián Arzeno, es una máquina de felicidad.
Desde que Orsai se animó a hacer cine, hace tres años, pasaron cosas increíbles y que son difíciles de dimensionar: formamos una comunidad de socios productores, ganamos premios, participamos de festivales y le vendimos la película a una de las plataformas más importantes del mundo. Lo sorprendente es que los protagonistas están igual de desconcertados que nosotros.
Fio y Sebastián contaron que todavía no pueden creer la repercusión enorme que tuvo y sigue teniendo la peli. La actriz reveló que haber participado de este proyecto le «cambió la vida profesional»: consiguió un representante, pudo cruzar el charco e instalarse en el barrio porteño de Villa Crespo y, tal vez lo que nos pone más contentos, ganó muchísima confianza personal en su trabajo como actriz.
Sebastián no se quedó atrás: no se esperaba en absoluto quedar seleccionado para el papel y menos conectar al instante con su compañera de elenco. Para él, contó, es muy importante para que no haya incomodidades ni rispideces. Además, haber vivido una experiencia así y estar presente en el 95% del proyecto, como lo definió nuestro galán, es alucinante porque hay buenas críticas, invitaciones a eventos, redes de contactos que se empiezan a tejer.
