En medio del calor de una tarde venezolana cualquiera, una cabeza de leopardo aparece tirada sin rastros ni pistas. A esta altura, nada de lo que pase en Venezuela sorprende, ni siquiera al autor de este relato.
En medio del calor de una tarde venezolana cualquiera, una cabeza de leopardo aparece tirada sin rastros ni pistas. A esta altura, nada de lo que pase en Venezuela sorprende, ni siquiera al autor de este relato.
Una estrella de la televisión se resiste a quedar en el olvido: el paso del tiempo está convirtiendo en anónimo a Daniel Novelli y, antes de que eso ocurra, contrata a una periodista insegura y con buenas intenciones para que lo ayude.
Una carnicería del conurbano, dos lechones, un sorteo y un viejo que gasta todos los billetes que tiene para comprar cuarenta y siete números de la rifa.
¿Cuál es el momento exacto en que un hombre se siente padre? ¿Cuando su hijo nace? ¿Cuando comienza el embarazo? ¿Nunca? Las preguntas se las hizo todas el periodista un tiempo antes de su muerte prematura.
¿Por qué se quiere tirar abajo del tren el Caripi, si tiene la verga más larga de todo el Tucumán? Para empezar, porque se enamoró por primera vez en la vida. Y para peor, de una porteña.
El que se defiende en primera persona, frente a un juez, es el presunto asesino de Justo José de Urquiza, un año después de la rebelión de Ricardo López Jordán. Este cuento fue publicado por primera vez en 1967 en el libro «La invasión».
Desde el anonimato, una doctora cuenta en primera persona un caso real de excesos, drogas y desesperación. Una previa, una «jarra loca» y el desmadre. Una historia que, en los pasillos del hospital, se pone cada vez más oscura.
Durante la pandemia, lo real y lo virtual empezaron a mezclarse. Lo que en principio era impensado –psicólogos online, cumpleaños sin invitados— se empezó a asimilar a un ritmo voraz. Esta es una historia delirante y ansiosa, cercana a la tragedia.
Un hombre se despierta por la mañana y, antes de salir de la cama, le cuenta a su compañera de toda la vida el sueño que acaba de tener. Una historia entrañable interpretada por una pareja de actores entrañables.
No sabemos a ciencia cierta cuánta gente lee este texto final, de exactas mil palabras. Para los perezosos, le pedimos al señor Casciari que los leyera en voz alta como una declaración de principios.